Gigantes del streaming le hacen la guerra a Canadá

Gigantes del streaming le hacen la guerra a Canadá

Las principales compañías de streaming acudieron a la Corte Suprema de Canadá para intentar evitar el nuevo impuesto de 5%, impulsado por el primer ministro Justin Trudeu, a sus operaciones en el país

En una confrontación notable, los gigantes del streaming Netflix y Paramount han declarado la guerra al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, debido a un nuevo impuesto del 5% sobre los ingresos generados en Canadá. Este impuesto, que se aplica a las grandes empresas de streaming que operan en el país, ha sido ampliamente criticado por las corporaciones afectadas, quienes argumentan que esta medida es injusta y perjudicial para su modelo de negocio.

Netflix y Paramount han llevado su caso a la Corte Suprema de Canadá, solicitando la anulación del impuesto. Según estas compañías, el nuevo gravamen podría tener un efecto adverso en la industria del entretenimiento y disuadir futuras inversiones en contenido canadiense. La legislación propuesta por Trudeau se enmarca en un esfuerzo más amplio para garantizar que las grandes corporaciones tecnológicas contribuyan equitativamente a la economía canadiense. Sin embargo, las empresas de streaming sostienen que ya invierten significativamente en producción local y que el impuesto es una carga adicional innecesaria.

Argumentos en contra del impuesto
Justin Trudeau es el principal impulsor del nuevo impuesto de 5% a las plataformas de streaming
Crédito: Alex Brandon | AP

Netflix y Paramount han presentado argumentos contundentes en contra del nuevo impuesto. Afirman que ya están cumpliendo con las expectativas de inversión en contenido canadiense y que este impuesto adicional podría reducir su capacidad para financiar proyectos locales. Además, argumentan que esta medida podría poner a Canadá en desventaja competitiva en comparación con otros países, ya que podría desincentivar a las empresas tecnológicas de establecer operaciones significativas en el país.

El impuesto del 5% se ha diseñado para capturar una parte de los ingresos que estas empresas generan en Canadá, pero los críticos dicen que no considera adecuadamente las inversiones y los costos asociados con la creación de contenido local. Las compañías también han expresado preocupaciones sobre la transparencia y la implementación del impuesto, sugiriendo que podría haber problemas prácticos significativos que complicarían su cumplimiento.

Reacciones y perspectivas futuras

La respuesta del gobierno de Trudeau ha sido firme, defendiendo el impuesto como una medida necesaria para garantizar que las grandes empresas de tecnología paguen una parte justa de impuestos.

Sin embargo, esta postura ha provocado un debate amplio en el país, con opiniones divididas sobre la equidad y la efectividad de la medida. Algunos analistas sugieren que, si bien la intención de aumentar la recaudación fiscal y apoyar la producción local es loable, el impuesto podría tener consecuencias no deseadas que podrían dañar la industria en el largo plazo.

Mientras tanto, el resultado de la disputa legal en la Corte Suprema será crucial. Si la corte decide en favor de Netflix y Paramount, podría establecer un precedente importante que limitaría la capacidad del gobierno para imponer impuestos similares en el futuro. Por otro lado, una decisión a favor del gobierno podría fortalecer la posición de Canadá en la regulación de las grandes tecnológicas, marcando un cambio significativo en la forma en que se manejan los ingresos generados por servicios digitales en el país.

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