Un nuevo estudio encontró que las mujeres que seguían la dieta mediterránea tenían hasta un 24% menos de riesgo de enfermedad cardíaca y un 23% menos de riesgo de muerte.
La dieta mediterránea es considerada como un plan de alimentación saludable con distintos beneficios asociados, se ha relacionado con un menor riesgo de riesgo de enfermedad cardíaca y muerte. Estudios están explorado su impacto por sexo en ensayos clínicos.
Un nuevo estudio encontró que las mujeres que seguían una dieta mediterránea tenían hasta un 24 por ciento menos de riesgo de enfermedad cardíaca y un 23 por ciento menos de riesgo de muerte.
Los hallazgos, publicados en Heart Journal, examinaron datos de 16 estudios publicados en los que las mujeres seguían la dieta mediterránea. La Universidad de Sydney compartió que los estudios se realizaron entre 2006 y 2021 e involucraron a más de 722 000 mujeres participantes.
El análisis encontró que el riesgo reducido de enfermedad cardíaca fue registrado en mujeres de todas las etnias, con mujeres de ascendencia europea con un riesgo 24% menor y mujeres de ascendencia no europea (asiáticas, hawaianas nativas y afroamericanas) con un riesgo 21% menor.
“Una dieta saludable es un factor muy importante en la prevención de enfermedades del corazón”, dijo la autora principal del estudio, la profesora asociada Sarah Zaman, del Centro de Investigación Aplicada Westmead de la Universidad de Sydney y becaria líder futura de la Fundación del Corazón.
Alimentos que incluye la dieta mediterránea
La Fuente de Nutrición de Harvard explica que la dieta mediterránea es un plan de alimentación basado principalmente en plantas que incluye la ingesta diaria de cereales integrales, aceite de oliva, frutas, verduras, frijoles y otras legumbres, nueces, hierbas y especias.
Las proteínas animales se comen en cantidades más pequeñas. La proteína animal preferida es el pescado y el marisco con un consumo al menos dos veces por semana, también se incluyen proteínas animales de aves, huevos y productos lácteos (queso o yogur) aunque en porciones más pequeñas, diariamente o algunas veces a la semana. La carne roja se limita a unas pocas veces al mes.
La dieta mediterránea recomienda el aceite de oliva en sustitución de otros aceites y grasas (mantequilla, margarina). También incluye otros alimentos con grasas saludables como aguacates, nueces, pescados grasos (como salmón y sardinas) y nueces.
Por Alba Hernández